LA TABULA RASA
“La fenomenología fue la corriente filosófica que imperó en España e
Hispanoamérica durante la jefatura intelectual de Ortega en el primer tercio
del siglo XX y la que impulsó entre nosotros los primeros intentos de un
filosofar riguroso” Página 37.
El texto de Danilo Cruz Vélez, un importante filósofo colombiano, relata
la historia o la evolución del pensamiento filosófico que llegó a latinoamérica,
desde los primeros planteamientos o origen hasta su llegada a hispanoamérica,
pues si la filosofía que hoy discutimos no es propiamente americana o
descendiente de los primeros pobladores, es puramente occidental, basada en
diversos autores tanto clásicos como contemporáneos.
El origen de la filosofía se dio en Grecia, los más conocidos fue Platón
y Aristóteles, pues siendo uno maestro de otro, tuvieron diferencias entre sus
pensamientos filosóficos, estos dos dejaron legados metafísicos que nunca se olvidaran,
fue Cicerón uno de los principales rescatadores del pensamiento griego, pero
con la llegada del emperador Constantino se generó un desinterés en todo el
pensamiento griego, aunque la filosofía cristiana fue en sí una evangelización
de Platón, donde se transbordan ideas de otro mundo, donde están todas las
ideas, y que el cuerpo es la cárcel del alma, y muchas otras teorías. España y
en especial Toledo, fueron los puntos historicos y geograficos de la
recuperación del pensamiento griego perdido o olvidado, aunque irónicamente los
traductores de Toledo ubicados en españa, no tenían españoles, por lo cual
España era una tabula rasa en el pensamiento filosófico, aunque los krausistas
fueron los primeros en romper el aislamiento ideológico de España, quien es mas
reconocido es Ortega y Gasset, en quien cuya primera filosofía o pensamiento
fue el pensamiento neokantiano, pero despues se dejo influenciar por el
fenomenología fundado por Husserl.
Como lo decía Kant nosotros no podemos acceder al noúmeno (objeto en sí)
sino a la fenomeno (percepción del objeto en sí en nosotros), podemos sacar
todo el conocimiento de los fenómenos que nos suceden, pero no es lo mismo con
los noúmenos, que tienen una esencia propia libre del observador, es decir en
el aprendizaje y la percepción no sólo somos un agente pasivo, sino activo,
hacemos el conocimiento a través de nuestra interacción con el fenómeno; es
parecido a lo que nos decía Platón, las ideas ya existen en algún lado, son
inmutables y eternas, nosotros solo vemos un reflejo o una copia de esas cosas.
Para conseguir estas ideas generales de las cosas hay que reducir la cosa hasta
lo más mínimo