La crisis de la élite, L. Parra. (Cristian y Angie)

La Crisis de la Élite

“Por el contrario, cuando, como ocurre con el moderno capitalismo, el motor es el lucro, entonces el ámbito de lo que se considera como necesidades se convierte en algo extremadamente volátil e imprevisible. De esta manera, el individuo racional, que en este contexto equivale al individuo que quiere sobrevivir, ha de asumir la tarea de desarrollar todas sus facultades” paginas 111-112

En el ensayo del autor se explora la tesis de Alfonso Lopez Michelsen de las influencias ideológicas calvinistas o protestantes en las instituciones colombianas, Lisímaco Parra amplia esta tesis y nos muestra como las elites gobernantes están en crisis, esa crisis que el denomina infantilismo que no es más que la incapacidad entender la modernidad, y adaptarla a la sociedad colombiana; en nuestra sociedad la corrupción esta desde los bajos niveles hasta los más altos, pero esta corrupción está relacionada con una concepción moral, que no hubiera sido posible sin el realismo mercantil de la banca, del comercio, y de la economía en general, o del pensamiento “el fin justifica los medios”.

En la concepción del trabajo que llega con el capitalismo es muy diferente de la doctrina económica escolástica que regía antes, el cumplimiento de una tarea profesional era como un llamado divino, como un deber religioso, por lo tanto el lucro se racionalizaba como resultado de la ejecución de la profesión, y la riqueza era producto de ella no fin, además en los protestantes se abandona un poco el tradicionalismo en el trabajo, dando lugar a la innovación, desde la visión kantiana es un deber moral cultivar los propios talentos, y la riqueza es vista como efecto del cultivo de los talentos, de modo que el producto de esta actividad al entrar al mercado y sus leyes va seguir como una actividad productiva de alta calidad y competitiva.

En efecto en la sociedad tradicional el circulo de necesidades es fijo, y por consecuencia las habilidades requeridas para satisfacerlo, en este sistema desde el trabajador hasta el empresario solo buscar ganar lo necesario, teniendo como motor la satisfacción de las necesidades; pero con el moderno capitalismo hay un giro fuerte, la riqueza ya no es un consecuencia, sino es un fin, el motor es el lucro, ahora las necesidades son algo abstracto, por lo tanto en este contexto el ser humano ha de desarrollar todas sus facultades, ya que puede servir a múltiples propósitos, es decir ahora el trabajo no es siempre el cultivo de las habilidades, sino el modo de sobrevivencia en un mundo competitivo. Este proceso de da por una heterogeneidad de intereses, en la cual para lograr unos intereses se aplastan otros, mostrando un pensamiento puramente egoísta y amoral por parte de quienes poseen poder.


Preguntas: ¿Para salir de las crisis de las elites es necesario que el pueblo empiece a salir de ese infantilismo primero? ¿Cómo puede el mercado servir al cultivo de talentos y no el desarrollo de facultades para satisfacer al mercado?