Discurso del Congreso
de Escritores
“Aquí
no hay servidores públicos. Esos son cuentos. Lo que hay son aprovechadores
públicos que se reparten y parrandean los puestos. Se los pasan de padres a
hijos, de padres a hijos, de compinches a hermanos; las alcaldías, las
gobernaciones, los ministerios, la presidencia” pagina 47.
Durante
años en la política o en las instituciones de poder han estado los mismos
apellidos, las mismas familias, las mismas corrientes de pensamiento, y
todo porque nosotros lo hemos permitido,
no deberíamos permitirlo incluso Fernando Vallejo en un discurso dijo en su
tercer mandamiento no votes, escoger al malo para evitar el peor es inmoral, y
si un tirano se apodera de tu país, mátalo.
En
este país ha corrida tanta tinta como sangre, en constituciones y decretos que
solo le interesan a unos, a las sirvientas que se convirtieron en dueñas de
casa, unos que dañaron lo que estaba bien y empeoraron lo que dañaron, que se
hacen llamar honorables hasta el punto que no se sabe si el termino tiene otro
significado o no debería usarse, y nosotros pagando los impuestos y platos
rotos de su fiesta que ellos nos cobran. Nos cobran todo hasta lo más absurdo,
como lo era el impuesto a vivir fuera del país y no tener hijos, y es que como
él lo dice quitar la vida debería ser un delito menor que imponerla. El ejecito
gasta una gran parte del presupuesto nacional, nosotros pagamos por la guerra,
pagamos por nuestra vida pero también pagamos por nuestra muerte, como es el
caso del servicio militar obligatorio, es que buscamos la paz a través de la
guerra, protegemos a las víctimas del conflicto armado y creamos más al mismo
tiempo.
El
monstro bicéfalo conservador-liberal ha creado muchas muertes, después paso a
ser una hidra de cinco cabeza (guerrilla, paramilitares y narcotráfico), de las
cuales las nuevas salieron de las viejas, las cabezas no se hablaban, ni se
escuchaban ni se reconocían, pero se combinaron y salió el monstro bicéfalo
frente nacional y narcoguerrila, se reconocieron las cabezas, y ahora están en
diálogos de paz y también va haber impuesto de la paz. No podemos cerrar los
ojos y olvidar todo lo que paso, no podemos dejar impunidad o infamia, cada
cual debe pagar de una manera adecuada sus crímenes, ojala la vida ya no valga
lo mismo que lo vale contratar un sicario. Este conflicto solo ha creado
bandoleros, regado petróleo, derramado sangre, han desplazado, secuestrado,
asesinado, chantajeado, no podemos seguir oprimiendo al diferente, ni
imponiendo, pues la guerra debe ser el último medio desesperado después de la
diplomacia..
Preguntas:
¿Es posible que ese monstro de varias cabezas pueda convivir sin que sus
cabezas se ataquen, y que no sea un monstro? ¿Cómo hacer para que la ideología
no solo este en la cabeza sino también en todo el cuello así no ceder el
pensamiento a otros?